Determinación por alcanzar un sueño

Esta valiente Líder y pionera de doTERRA en México, tiene una de las carreras más exitosas en el territorio mexicano. Después de 8 años compartiendo bienestar, nos confiesa haber tenido que empezar de cero muchas veces, siempre luchando desde una posición de entereza, en donde ha encontrado su propósito y la oportunidad invaluable de cambiar no sólo su propia vida, sino también la vida de otros.

Una de las decisiones más difíciles para Lizeth y muchos otros Líderes, ha sido dejar su profesión y/o negocios para dedicarse por completo a doTERRA, decisión que hoy le ha rendido frutos. “Uno puede hacer dinero vendiendo mil cosas, pero cuando encuentras un propósito y te das cuenta que es mucho más fuerte que el dinero, es cuando realmente cambia tu perspectiva de vida. Eso es lo que tú obtienes al dedicarte a doTERRA. Para esta emprendedora mujer, uno de los grandes valores de doTERRA es dar a la gente la posibilidad de desarrollarse sin importar los estudios o habilidades que posean, siempre y cuando tengan el compromiso y las ganas de aprender. Así fue en su caso, ya que, tras casarse muy joven, se dedicó a desarrollar negocios propios. “Esto es algo muy importante: no necesitas tener una carrera previa, si quieres triunfar, puedes hacerlo”. A mí doTERRA me ha ayudado a redescubrirme y alcanzar mi potencial. Me gusta dedicarme a ayudar a las mujeres y a las personas para que crean en ellas mismas y encuentren una oportunidad para crecer”.

Sin embargo, cree que más que ofrecer un plan estructurado de crecimiento, doTERRA sienta las bases para el desarrollo de cada persona según su potencial y sus intereses. “Para mí doTERRA es como el mapa en donde hay un tesoro escondido, pero tienes que saber cómo descifrar ese mapa. Aprender lo que hay que hacer para lograrlo obviamente no es fácil, pero tiene la ventaja de que cada quien de acuerdo a sus talentos personales puede hacerlo y triunfar desarrollando su negocio, buscando su camino, su equipo y encontrando su manera de trabajar” comenta Lizeth.